Pirate Dragut is one of the most infamous figures in Cullera’s history, leaving a lasting legacy on this coastal town. Dragut, a feared Ottoman pirate

and lieutenant of the legendary Barbarossa, terrorized the Valencian coast in the 16th century. In 1550, he led a brutal raid on Cullera, looting the town and taking prisoners for ransom or slavery, a common tactic among Ottoman and Barbary pirates seeking to dominate the Mediterranean.

Today, Cullera embraces this dramatic history with the Dragut Cave Museum (Cova del Dragut), a fascinating attraction that transports visitors to the world of piracy. Inside the cave, exhibits display replicas of weapons, maps, and maritime artifacts, recreating the atmosphere of the pirate era. Nearby, the Cullera Lighthouse stands as a reminder of the town’s strategic importance in defending against such raids.

Every year, Cullera commemorates these events with the Pirate Dragut Festival, featuring a vibrant reenactment of the infamous attack. Locals dress as 16th-century townspeople and pirates, recreating the dramatic invasion with theatrical performances, mock battles, and storytelling. The festival also includes music, traditional Valencian cuisine, and lively parades, bringing the town’s history to life. This celebration makes Cullera an exciting destination for history lovers and festival-goers alike.

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El pirata Dragut es una de las figuras más infames de la historia de Cullera y ha dejado un legado duradero en esta ciudad costera. Dragut, un temido pirata otomano y lugarteniente del legendario Barbarroja, aterrorizó la costa valenciana en el siglo XVI. En 1550, dirigió una brutal incursión en Cullera, saqueando la ciudad y tomando prisioneros para pedir rescate o esclavitud, una táctica común entre los piratas otomanos y berberiscos que buscaban dominar el Mediterráneo.

Hoy, Cullera abraza esta dramática historia con el Museo de la Cueva del Dragut (Cova del Dragut), una fascinante atracción que transporta a los visitantes al mundo de la piratería. Dentro de la cueva, las exposiciones muestran réplicas de armas, mapas y artefactos marítimos, recreando la atmósfera de la era pirata. Cerca de allí, el faro de Cullera se alza como un recordatorio de la importancia estratégica de la ciudad en la defensa contra tales incursiones.

Cada año, Cullera conmemora estos acontecimientos con el Festival del Dragut Pirata, que incluye una vibrante recreación del infame ataque. Los lugareños se visten como ciudadanos y piratas del siglo XVI y recrean la dramática invasión con representaciones teatrales, simulacros de batallas y narraciones de cuentos. El festival también incluye música, cocina tradicional valenciana y animados desfiles que dan vida a la historia de la ciudad. Esta celebración convierte a Cullera en un destino apasionante tanto para los amantes de la historia como para los asistentes a los festivales.